Llegábamos el último día de la exposición “Post Menopausia” de la artista Rosemarie Trockel en el Museo Ludwig de la ciudad de Köln, Alemania.
La exposición se había inaugurado a fines de octubre del 2005 y ya estábamos a 12 de febrero; no tenía ninguna chance de verla.
Una amiga curadora de la ciudad de Atlanta, Lisa Kurzner, conocía al curador del área de fotografía del museo por lo que nos proponían ver la colección de fotos y tratar de interceder con los responsables de la muestra de la Trockel (que ya estaban desmontando) para verla aún en proceso de desmontaje.
Finalmente nos autorizaron a verla e hice un pequeño registro fotográfico que estoy subiendo al blog a pedido de algunos fans de la señora Rosemarie Trockel.
Rosemarie Trockel repasa su trayectoria en el Ludwig Museum
Del 29 de octubre de 2005 al 12 de febrero de 2006, en el Museum Ludwig de Colonia.
El nombre y el trabajo de la artista alemana Rosemarie Trockel (Schwerte, 1952) lleva más de tres décadas unido a la reflexión, a través de la obra artística, sobre la condición femenina y el papel de la mujer en la sociedad y en el arte. No en vano, en los primeros años ochenta, cuando el mundo del arte estaba copado prácticamente en su totalidad por lo masculino, la artista se destacó por introducir en esa escena roles y motivos típicamente femeninos. En este sentido, Trockel es una de las más destacadas representantes del arte feminista de aquellos años, junto a Cindy Sherman o Barbara Kruger. Desde hace tiempo, su nombre figura ya entre los más reconocidos autores de la contemporaneidad y es frecuente encontrar su obra en las citas más importantes del panorama creativo internacional. Ha participado en la Documenta X, en Kassel; en la 48° Bienal de Venecia en 1999; en la EXPO 2000 en Hannover y, en ese mismo año, el Centre Pompidou de París le realizó una interesante retrospectiva.
La exposición que ahora puede visitarse en el Ludwig Museum de Colonia, ciudad en la que Trockel vive y trabaja, recoge casi treinta años de producción ubicados en un espacio de más de mil metros cuadrados. La muestra, que ha sido realizada en completa colaboración con Trockel, tiene dos focos principales de atención: el primero se centra en los denominados "Wollbilder" y en la complejidad de las obras de los años ochenta, influenciada por artistas como Beuys y Marcel Duchamp; el segundo reúne bajo el nombre de "Moving Walls" los trabajos más recientes, entre los que destacan pequeñas esculturas, objetos y bosquejos para libros, fechados entre 2000 y 2005.
Pintura, dibujos, esculturas, collage, fotografías, instalaciones y trabajos hechos con punto (algo frecuente en el trabajo de Trockel y vinculable a la actividad generalmente de mujeres de tejer y hacer patrones) dan forma a un corpus artístico con el que se revisa la modernidad desde un punto de vista femenino, a veces con crueldad y otras con humor y provocación, debido a su gran versatilidad.
Sexualidad, feminidad, cultura y arte se entretejen en la obra de Rosemarie Trockel, ofreciéndonos imágenes que seducen por su sentido familiar y decorativo pero que encierran un rico universo plástico, de complejo significado, más allá de su apariencia.
Rosemarie Trockel: Subversivamente femenina - HELENA TATAY
Es sorprendente ver Post menopausia en grandes letras, dada la invisibilidad social que el tema suele tener. Este es el título que Rosemarie Trockel le ha dado a su exposición retrospectiva en el Museo Ludwig de Colonia, su ciudad natal. El título alude al final de un ciclo creativo, porque esta exposición es una mirada atrás a 30 años de trabajo, pero lo hace desde una perspectiva femenina, y a la vez juega a nombrar públicamente lo que se suele mencionar en privado, resucitando en el espectador los sentimientos contradictorios y las ansiedades que los clichés de genero suelen provocar.
Desde el principio, su trabajo se ha caracterizado por tomar en cuenta las condiciones sociopolíticas en las que se da (y se ha dado) la producción artística, y por mantener un perspicaz, irónico y subversivo punto de vista femenino.
Trockel pertenece a lo que podríamos llamar la tercera generación de los artistas alemanes que se dieron a conocer internacionalmente en los años 80. Sus compañeros de generación eran casi todos hombres y pintores. Ella fue prácticamente la única que se interesó por temas como el cuerpo o la construcción social del sujeto que tan relevantes son ahora. En estos 30 años, ha empleado casi todos los medios conocidos del dibujo al vídeo, para elaborar un trabajo que abarca un amplio espectro de temas e intereses tan diversos como: Los animales y su función como espejo de nuestro inconsciente (recordemos que su participación en Documenta X fue una casa para cerdos); la belleza, su relación con los iconos sociales femeninos; el fenómeno de la moda; la historia del arte; la antropología; la cultura popular y un largo etcétera.
